domingo, 11 de mayo de 2014

EDITORIAL. "Rectificar es de sabios, y reconocer el engaño de inteligentes", por Julián Ezquerra Gadea

Dr. Julián Ezquerra.
Corría el año 2007 y el sindicato de los médicos de Madrid, por entonces llamado FEMYTS, antecesor del actual AMYTS, firmaba un acuerdo con la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid que significó un hito en las mejoras laborales de los médicos; en esos acuerdos se reconocían demandas históricas de los facultativos. No quiero hacer un repaso exhaustivo de las mismas, pues son de sobra conocidas y una referencia para muchos de nosotros en cuanto a logros del sindicato médico.

Una de las mejoras acordadas hacía referencia al acuerdo de hacer interinos a los médicos que llevasen dos años con contratos eventuales, reconociendo así su necesidad y por tanto incorporando esas plazas a las plantillas de los centros sanitarios. Pasaron los años, y la Comunidad de Madrid, de forma injusta, injustificada y sin ningún tipo de criterio, incumplió año tras año este acuerdo, a pesar de las continuas peticiones que se realizaban. Siempre había alguna situación que lo impedía, ninguna de ellas lógica. Lo cierto es que decidieron de forma unilateral prohibir desde la Consejería de Hacienda que se hicieran interinos, incumpliendo de esta forma un acuerdo refrendado en Consejo de Gobierno, y publicado en el BOCM.

En esta situación veíamos pasar los años, las leyes de presupuestos y las de medidas fiscales, y una tras otra reiteraban los incumplimientos de los acuerdos de 2007, dándoles cobertura legal, que no justa, en las referidas leyes. En esta situación llegamos al fatídico final de año 2012, y el Consejero Lasquetty, en un alarde de desprecio a la negociación y legitimidad de las organizaciones sindicales, anuncia un “Plan de Medidas de Garantía de Sostenibilidad del Sistema Sanitario Público de la Comunidad de Madrid” que provoca el mayor rechazo que los profesionales y sus organizaciones, asociaciones, colegios profesionales, sociedades científicas, ciudadanos, partidos políticos, etc. han visto en los últimos años. Tras 18 meses de intensas huelgas, manifestaciones, encierros, demandas judiciales, etc. el citado plan se abortó y dejó las peores y maltrechas relaciones con los profesionales.

En esta situación y con el cambio de consejero, se intenta recomponer la sintonía y volver a la senda del consenso, el acuerdo y la normalización de relaciones entre Administración y profesionales, lo que sin duda es bueno y deseable. Fruto de este nuevo clima de relación, AMYTS hace un importante esfuerzo y presenta a los facultativos una encuesta que permite conocer de primera mano cuales son las demandas más importantes que desde los profesionales se hacen a la administración. Y como no podía ser de otra forma, se certifica que hacer interinos a los eventuales, miles de compañeros, es una de sus principales demandas. Así se le hizo saber al Consejero, y con un documento en el que se recogían 18 puntos reivindicativos nos fuimos a una reunión en la que fue incapaz de responder con seriedad a las demandas, dando evasivas y poca (por no decir nula) concreción. Afirmó incluso desconocer cuales eran las medidas de mejora laboral para los facultativos que el Presidente González había anunciado. 

En esta situación de indefinición por parte del Consejero, el Presidente de la Comunidad, Sr. González, convoca un sábado por la mañana en el Hospital Gregorio Marañón a un selecto grupo de profesionales estratégicamente seleccionados, y anuncia unas medidas entre las que se incluye la conversión en interinos de 5000 eventuales. Y es en este punto en el que nos encontramos, en el que tenemos que recordar a la Administración aquello que decía Miguel de Cervantes Saavedra: 
  • “adonde interviene el favor y las dádivas, se allanan los riscos y se deshacen las dificultades”. 
Pero en nuestro caso no nos engañan, y aunque rectificar es de sabios, reconocer el engaño es de inteligentes, y los médicos lo somos y sabemos reconocer los intentos de engatusarnos con dádivas y favores, que no buscan nuestro bien, sino más bien el suyo. Interinos, SI, por supuesto, pero sin dádivas, es una cuestión de derecho y justicia. Queremos reconocimiento y AMYTS no puede admitir otros criterios que no sean los de igualdad, mérito y capacidad en el acceso al bien preciado que en estos momentos de precariedad es una plaza de médico interino.

Y para terminar, volver a insistir en que un Gobierno serio y responsable, un Gobierno que merezca el crédito y el aprecio de los ciudadanos, debe ser garante de la legalidad, cumplir los acuerdos y dar garantía jurídica. Y con independencia de quien sea el partido que sustenta un Gobierno, pues estos incumplimientos son generales con independencia de quien gobierne, debemos exigir a todos que esto sea una realidad, no una gracia que se concede siempre en época electoral, que parece lo único que importa a todos los políticos.

Julián Ezquerra Gadea,
secretario general de AMYTS